Tratamiento de márgenes de carreteras para seguridad vial y mantenimiento del firme
Recientemente se ha abierto un encendido debate sobre el uso de productos químicos (principalmente el glifoxato) en el tratamiento de los márgenes de las carreteras. El control de la vegetación en las zonas colindantes a las vías de circulación suponen un asunto de interés público de primer orden, pues afectan a la seguridad vial y al mantenimiento de las infraestructuras. Por todo ello entendemos que debemos explicar los motivos por los cuales se realizan estos tratamientos, y cómo se llevan a cabo.
Porqué debemos tratar los márgenes de las carreteras
El control de la vegetación en los márgenes de las carreteras es una cuestión fundamentalmente de seguridad vial, pero también de mantenimiento de las infraestructuras, y las razones por las cuales se llevan a cabo son de gran calado:
- Se genera una zona de seguridad para facilitar que los vehículos pueda realizar maniobras de evasión ante accidentes.
- Mejora la visibilidad en las curvas.
- Contribuye a evitar que especies arbóreas generen puntos de peligro.
- Se elimina el deterioro del firme por las raíces.
- Se controla el riesgo de incendio en márgenes.
Si bien es cierto que para el control de la vegetación se puede usar el desbroce, éste sólo es eficaz como medida complementaria al tratamiento con productos químicos. El desbroce puede realizarse de forma manual, con desbrozadoras de hilo, o de forma mecánica, con desbrozadoras sobre tractor, cuando la vegetación ha alcanzado una considerable altura.
Cómo se realiza el tratamiento de los márgenes de las carreteras
Los tratamientos normalmente se realizan en tres veces al año, antes de iniciarse la primavera, antes del verano y en otoño. En todas las ocasiones se dota de una cantidad residual para que permanezca activo en el periodo que transcurre entre cada tratamiento.
SEMIN, la empresa de Grupo Triedro especializada en mantenimiento de infraestructuras, ha creado un equipo autónomo de tratamiento que, montado sobre camión, permite el tratamiento a una velocidad entre 25-30 km/h, aportando la cantidad requerida del producto.
Hasta la fecha, SEMIN ha tratado más de 1.200 km de márgenes, tanto con el uso de productos químicos como con desbroce manual y mecánico en zonas de alta vegetación. Ambas formas de control han dado óptimos resultados en el control del crecimiento de especies.
Como no puede ser de otra manera, SEMIN se encuentra inscrita en el Registro Oficial de Productores y Operadores de Medios de Defensa Fitosanitarios (ROPO). Igualmente, los compañeros que se encargan del tratamiento cuentan con la formación específica para aplicarlo.