Picos de flauta para evitar impactos con salvacunetas

Picos de flauta.

Como ya sabemos, el objetivo de la seguridad vial es evitar que se produzcan accidentes de tráfico. Pero también lo es que, en caso de producirse, tratar de minimizar al máximo posible los daños producidos. Cuando se estudia el trazado de una carretera, a menudo se pone el foco sobre la carretera en sí misma, y no tanto en su entorno en general. Por desgracia, son frecuentes los obstáculos en las zonas aledañas a la carretera, como árboles, muros, accesos, arquetas… que en caso de salida de nuestro vehículo puede provocarnos un fuerte impacto.

Precisamente el presente artículo trata sobre uno de estos frecuentes obstáculos: los salvacunetas. Se trata de esos “puentes” que permiten a los vehículos cruzar la cuneta cuando acceden a una finca colindante desde la vía. Estos salvacunetas están generalmente cruzados por un tubo que permite el paso de las aguas pluviales que transcurren por las propias cunetas; y están delimitados por dos muretes verticales, de bloque u hormigón. En definitiva, un obstáculo fijo, rígido y de gran masa que sobre el que se puede impactar de manera violenta y con graves daños  en caso de salirnos de la carretera.

Pico de flauta

Picos de flauta: Evitar impactos frontales y más tiempo de reacción

Para evitar estos impactos frontales, los ingenieros pueden recurrir a diversos elementos, aunque los más eficaces son los llamados “picos de flauta”. Son elementos que gracias a la formacion de dos prismas evitan el impoacto directo con los muros verticales del salvacunetas; de tal forma que si un vehículo se sale de la carretera, no colisiona con el obstáculo, sino que se desliza por encima de él. Ello permite, además de evitar el impacto, proporcionar al conductor un tiempo de reacción extra para reducir la marcha o reconducir la trazada.

En la obra que vemos en las imágenes, realizada por Grupo Triedro, se flanquean ambos lados del salvacunetas con dos muretes paralelos entre sí y con la carretera. Estos muretes están realizados en hormigón armado, y están construidos sobre solera también de hormigón. Sobre esta estructura se coloca una rejilla de acero macizo, que permite el deslizamiento suave del vehículo a la par que el transcurso de las aguas pluviales a través de ella. Finalmente se ha rellenado el trasdós (la superficie exterior de la estructura) con material procedente de la propia excavación.

Con todo, picos de flauta como el que vemos en las imágenes, han conseguido evitar un sinfín de accidentes por impacto, y por tanto, el número de muertes en la carretera.